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Y TÚ ¿QUIÉN DICES QUE SOY?


NO CON TEORÍA SINO CON TESTIMONIO


Frente a esa pregunta que me haces hoy, Señor, quiero guardar silencio antes de contestar con una idea o teoría, con aquello que he aprendido de ti en los libros. Quiero reflexionar sobre el testimonio que he dado y vivido y responderte así quién eres para mí.

Sólo con vida, obras, acciones se puede contestar correctamente esta pregunta. Mi forma de vivir y relacionarme con mis hermanos, mi esfuerzo por buscar al Señor en el silencio y mi deseo de querer ser signo del Evangelio dan a esa pregunta una respuesta mucho más hermosa que miles de discursos teóricos.

Que sea con mi testimonio y no con teoría la manera en que todos sepan quién eres para mí, Señor.

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